lunes, 4 de mayo de 2009

Nuevos formas de leer... y en consecuencia de pensar??

Revitsa Ñ - 25/4

A partir del lema de la feria del libro “Pensar con libros”, Ñ se propuso reflexionar sobre los cambios tecnológicos que transforman el mundo de la edición y hasta el concepto mismo del libro. Símbolo de la cultura a través de los siglos, sus modificaciones y nuevos soportes parecen prefigurar formas diferentes, novedosas de leer, y en consecuencia, de pensar.

Los cambios son muchos más rápidos que nuestra posibilidad de pensarlos, tanto que los intentos de reflexión sobre las nuevas tecnologías se tiñen de futurología y se suman coros de apocalípticos e integrados.
Vivimos con la sensación de correr siempre varios pasos detrás de los acontecimientos y de la posibilidad de reacciones frente a ellos. Paul Virilio hablaba de la hipervelocidad de la información como de una lógica que está llegando al mundo del libro, en forma de bibliotecas digitales, librerías virtuales.

El número de Ñ se propuso reflexionar sobre el libro y sus cambios contemporáneos, y también sobre la forma en que éste se ha relacionado históricamente con el pensamiento.

“Desde tiempos lejanos, el libro ha sido visto como la esencia del testigo cultural, el condenado por excelencia del pensamiento de los individuos y las sociedades que nos precedieron” – Christian Vandenthorpe en su investigación Del Papiro al Hipertexto. Y afirma categóricamente que bajo la forma electrónica que permite la manipulación y el copy paste, el valor del libro se trivializa.

Todos los volúmenes del mundo podrían estar, en pocos años, al alcance de un click. El buscador ya lleva digitalizados 7.5 millones de títulos de las bibliotecas estadounidenses, sin permiso.

¿Cómo no fascinarse ante el acceso rápido de lectores e investigadores a infinidad de textos? Muchos escritores aplauden la posibilidad de que las lecturas de sus libros se multipliquen en las más distantes regiones, a través de Internet. Un encuesta de Ñ digital dio la respuestas a favor de las iniciativa del buscador, frente a los que defienden las leyes de copyright.

Se trata de un recorrido por los conceptos que nos permiten pensar la reciente cultura participativa inaugurada por la Web 2.0, con el sello particular del trabajo/ juego/ invención de los lectores.
Antes que hablar de la muerte de la lectura, el autor prefiere pensar en su reinvención a partir de un sistema de lectoescritura multimedial más democrático y masivo, en donde las imágenes, los sonidos, los objetos y su posibilidad de manipulación permiten desarrollar nuevos lenguajes y, por lo tanto, un pensamiento con características diferentes
Más allá de los soportes que sostengan la lectura, lo que importa es que el lector se convierta en su coautor, es decir, le imprima una orientación y un significado a lo que carece antes de ser leído.

Francesco Tonucci, analiza y se pregunta si frente a la pantalla será posible experimentar la emoción de leer. Crear un clima cultural deberá ser la función de la escuela, ya que la información llegará a través de la televisión e Internet.